La conexión emocional más potente que existe es sin lugar a dudas la de una madre con su hijo. Precisamente por eso, a la hora de elegir el diseño de un tatuaje para madre e hijo, es importante que la elección refleje de algún modo todo ese cariño que existe entre ambos, y que los mantienen unidos por siempre sean cuales sean las circunstancias.
Si una madre y un hijo deciden hacerse un tatuaje para representar el amor entre ambos tienen muchas opciones entre las que poder elegir.
El nombre del hijo, o la fecha de nacimiento son algunos de los tatuajes que una madre suele hacerse para recordar un evento tan importante en su vida, bien sea en solitario o acompañados de algún otro elemento, como un corazón que simbolice su amor.
Otros tatuajes bastante comunes que las madres suelen hacerse para recordar a sus hijos son los retratos, especialmente de los niños en sus primeros años.
Las frases son otro de los recursos más socorridos, bien sea utilizadas en solitario o como acompañamiento de una figura.
En este sentido, un tipo de tatuajes que suelen tener bastante éxito entre madres es el de un animal con sus cachorros. Pueden ser elefantes, gatos, o cualquier otro animal, lo importante es que aparezcan juntas ambas figuras.
Este tipo de imagen es muy simbólica de lo que supone la maternidad, pero si además va acompañada de una frase, todavía gana más fuerza.
Si buscas algún tipo de tatuaje más original y que no sea tan evidente en cuanto a su significado, hay algunas posibilidades que puedes encontrar interesantes.
La huella dactilar de tus hijos es una de ellas. De hecho puedes tatuarte una huella por cada hijo, ya sea en distintas zonas del cuerpo o todas agrupadas.
Otro tipo de tatuaje que se ha hecho conocido por lucirlo Angelina Jolie es el de las coordenadas GPS de tu hogar o del lugar donde nació tu hijo. Unas cifras que para el resto de la gente serán un misterio pero que estarán llenas de significado para ti.
En todos estos casos es la madre la que se tatúa en honor al hijo o hija, especialmente cuando éstos son aún niños.
Pero también se da la circunstancia de que algunos hijos, al llegar a cierta edad, y gracias a tener una excelente relación con sus madres, también quieren grabar en su piel ese sentimiento.
En esos casos lo que suelen hacer unos y otros es tatuarse un dibujo similar, que tenga algún tipo de relación o que se completen entre sí. Si tus hijos son ya mayores y quieres tener un tatuaje compartido con ellos, presta atención a estas sugerencias.
Tatuajes que comparten madres e hijos/as.
Una forma de potenciar aún más esa unión entre madre e hijos es hacerse un tatuaje que ambos compartan. Lo habitual es elegir una figura que sea del agrado de ambos y tatuársela en la misma zona del cuerpo: un corazón, una flor, etc.
Los tatuajes complementarios también son una gran idea para transmitir lo necesarios que son los hijos para la madre y viceversa. Así, si tienes un hijo o una hija, puedes optar por tatuarte un candado y que él o ella se tatúe la llave, o en una variación del tatuaje de un animal con su cría, la madre puede tatuarse un animal adulto y el hijo o hija, el mismo animal en un tamaño menor.
Otra variante de estos tatuajes complementarios es grabar en una zona del cuerpo como la muñeca la mitad de una figura. De este modo, la figura cobra su total significado cuando las muñecas de madre e hijo se juntan.
Esto puede hacerse, por ejemplo, con la figura del Ying o el Yang, con una mariposa, o en general con cualquier diseño que tenga una simetría perfecta.
¿Y si una madre tiene varios hijos y quiere compartir un tatuaje con todos ellos? Una solución es que tanto madre como hijos se graben en la misma parte del cuerpo una figura que tenga relación con las demás, por ejemplo, un sol, una luna y una estrella.
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