Cualquiera desearía hacerse a la mar, navegar día y noche sin más amparo que los designios de la mar, sin más rumbo que el marque el viento. Tener un amor en cada puerto, una compañía que sea durante meses tu familia...
Es, desde luego, una idea muy romántica de los oficios relacionados con el mar y, a buen seguro, cualquiera que lo desempeñe podría darnos una idea menos agradable, más dura y real... o no. Si tu vida está en tierra firme, no importa. Desquítate haciéndote un tatuaje con motivos náuticos. A continuación, te ofrecemos algunas sugerencias a través de novedades y recopilaciones de nuestros propios artículos.
Opciones son todas aquellas que representan motivos o útiles relacionados con el mar y con la navegación. Se puede ir de lo más simple a lo más elaborado y todo daría buenos resultados si escogemos un diseño bonito. Menos es más con la rosa de los vientos, pro ejemplo, que puedes encontrar en versiones más complejas o más austeras, en mayor o menos tamaño. Sirve para estudiar la dirección desde la que sopla el viento (y que recibirá un nombre concreto en función de ello) o para estudiar la velocidad a la que sopla el mismo.
Los nudos también son algo muy marinero, como ya te hemos mencionado. Tiene un significado de lo más trascendental si lo entendemos, por ejemplo, como lo entendían los celtas, que le atribuían un significado de vida eterna. Un nudo es el punto donde dos cuerdas o dos partes de una misma cuerda se juntan, se entrelazan. Una cuerda que gira como gira nuestra vida, que nos encuentra con otros o con hace unos lazos más o menos fuertes.
En cuanto a más motivos marinos de los que ya te hemos hablado, en su momento dedicamos un extenso artículo a las anclas, que puede buscar si es el diseño que estás buscando. El ancla es un elemento muy marinero pero, a la vez, es aquello que mantiene al barca atado a la tierra, que le "impide" salir a mar abierto. O que le protege de inclemencias de las mareas, ayudándolo a que no navegue a la deriva. Todos tenemos un ancla en nuestras vidas, sea la familia, las creencias religiosas o la ideología. Permite multitud de opciones, en su versión pequeña y austera, transformada o como elemento de una composición.
En cuanto a barcos, encontramos algunos célebres cuya historia bien merecería un tatuaje. El clásico ejemplo es la de Titanic, que zarpara Reino Unido a Norteamérica, destino al que nunca llegó, dejando en el camino cientos de almas. El insumergible, le decían. Una vez más, la naturaleza demostró ser superior a la egocéntrica y poco humilde mente humana. Era el barco más grande jamás construido, pero no bastó su tamaño cuando chocó contra el iceberg que lo hundió en medio del Atlántico.
Más éxito tuvieron la Pinta, la Niña y la Santa María, las carabelas que sí consiguieron surcar el Atlántico en 1492 al mando de Cristóbal para descubrir El Nuevo Mundo y sus tesoros. Un hito para la historia de España y de Europa que no es entendido como un éxito entre muchos/as sudamericanos/as, claro está... Queen Anne's Revenge, por su parte, es el nombre que le dio el pirata Barbanegra al buque francés que capturó y usó para abordar a otros tantos navíos en aguas del mar Caribe, hasta que consiguió uno mejor y lo dejó varado en un banco de arena.
Lo marinero ha inspirado también la moda, aportándolo un azul marino que nunca cae, combinado con blanco o incluso rojo para los complementos. Es normal que también esté más que asentada en los estudios de tatuajes.
Escribe un comentario