La unión entre estos dos seres del mismo signo tiene bastantes opciones de terminar en relación estable. Sin embargo, no debemos esperar una gran historia llena de pasión.
Desde las primeras citas se hace evidente que se reconocen mutuamente muchos puntos en común y que estos les ayudan a acercarse. Disfrutan de estar juntos, de verse con frecuencia. Su relación suele tardar un poco en materializarse y tomar consistencia. En efecto, tanto el hombre como la mujer Capricornio necesitan observar a su pareja, conocerla bien para concederle toda su confianza y proyectarse en una vida en común, con todo lo que esto conlleva.
Juntos, encontrarán el equilibrio con relativa facilidad. La mujer Capricornio valora la seriedad de su compañero, la manera en la que trata sus compromisos amorosos y sus responsabilidades familiares. Con él, ella que es una persona que necesita conocer su rumbo emocional, se siente totalmente segura.
Él, por su parte, necesita tener siempre el control de las cosas y a veces tiene problemas para ocultar sus celos. Tiene la esperanza de que ella se comprometa completamente en el proyecto de vida que él le plantea. La mujer Capricornio debe ser capaz de tranquilizar a su pareja y mostrarle que no tiene la intención de engañarle. Cuando esté tranquilo de que nadie le va a traicionar será menos autoritario y tiránico (suele ocurrir cuando una persona de este tipo siente que las cosas y la gente que le importan se le están escapando). Por su parte, la mujer Capricornio en ocasiones tendrá que hacer algunas concesiones y entender que su pareja a veces anteponga el trabajo a la relación. El trabajo es extremadamente importante para él y en caso de dificultades profesionales, a veces tendrá que aceptar su mal humor y su dificultad para alejarse de los problemas laborales fuera del horario de trabajo.
Si logran superar estas dificultades relacionadas con la posesividad y el egocentrismo, podrán vivir una vida de pareja armoniosa y aportarse mucho el uno al otro.
El hombre Capricornio es alguien en quién su esposa puede apoyarse en caso de problemas. Él podrá protegerla, tranquilizarla, darle todo el amor que necesita. Por el bien de la relación ella no debe presionarlo por no ser demasiado comunicativo y apasionado en el día a día. Con el tiempo, ella aceptará su timidez y forma de ser reservada, de tal forma que puede que él nunca tenga que expresar realmente sus sentimientos, como le gusta. Pero en el caso de que esto no ocurra, el hombre Capricornio tendrá que hacer un esfuerzo, aunque le lleve tiempo, ya que la mujer Capricornio necesita que su pareja le muestre su afecto y le diga a menudo lo que siente por ella.
Siendo ambos bastante introvertidos, se beneficiarían de un mayor desarrollo en su vida social y esto podría aportarles mucho. De lo contrario, corren el riesgo de encerrarse en una vida bien organizada, pero tirando a aburrida. Cada uno podría tender a sumergirse completamente en sus actividades, casi siempre relacionadas con el trabajo, porque los Capricornio valoran mucho su éxito personal. De ellos depende poner freno a sus diferencias para hacer que el amor dure mucho tiempo.
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