El sagitario: ¿Cómo es como padre y qué relación tiene con sus hijos?

El sagitariano cuenta con un gran corazón, y al estar regido por el planeta Júpiter, es también un extraordinario seductor. Idealista por naturaleza, se esfuerza por tener siempre paz y armonía a su alrededor. Suele confiar en los demás y cree firmemente en la bondad de la humanidad. Es optimista por naturaleza y se muestra tal y como es, sin complejos. No le preocupa lo que los demás piensen de él. Además, es honesto y abierto.

Es un amigo fiel y un buen compañero, al que le gusta dejarse llevar y disfrutar del momento, lo que a veces le impide tomar buenas decisiones, ya que esto requiere paciencia y ver las cosas desde diferentes puntos de vista. Todo esto se manifiesta también en la relación con sus hijos, con los que se muestra generoso y tolerante, casi siempre tranquilo y a veces ingenuo. Aunque es una persona amable, su honestidad y franqueza le llevan a decir cosas que molestan a los demás, sin quererlo.

Quieren hijos inteligentes y cultos

Como es una persona profunda, una conversación interesante tenga el mismo valor para él que un gran viaje o una actividad al aire libre (las cosas que más le gustan). Sagitario no teme que sus hijos sean diferentes a él, siempre que cultiven su inteligencia y traen de ampliar sus conocimientos.

En el sentido de la vida misma, siempre valora su libertad y tiene una gran necesidad de moverse y ver cosas nuevas, de explorar nuevos lugares y realidades. Esto es evidente también en las relaciones con sus hijos, donde tratan de estimular su gusto por la aventura.

Pero el hecho de que le guste la libertad no significa que le guste la soledad. A Sagitario le gusta compartir todo con su pareja y sus hijos, aunque es cierto que a veces necesita estar solo. Es feliz y soñador y da a sus hijos y pareja libertad y confianza, para hacerles la vida más fácil. También es idealista, honesto y sincero.

Ayuda a sus hijos y está presente en sus vidas

Como padre, suele estar muy presente en la vida de sus hijos, ayudándole en las tareas diarias y reservando un tiempo para jugar y hacer actividades con ellos. Por encima de cualquier otra prioridad, los sagitarianos se permiten disfrutar de cada momento.

Esto los convierte en los mejores compañeros posibles, porque se entregan al máximo. En el caso de una conversación con un sagitariano, puedes estar seguro de que hará todo lo posible por estar presente, comprender tu punto de vista y discutir de una manera constructiva. Con sus hijos hace lo mismo, se comunica y se involucra totalmente en el juego.

Construirá juguetes, se sentará en el suelo, pensará en aventuras. En definitiva, se trata de una persona que se ha propuesto vivir cada momento y disfrutarlo, por lo que se dedica a hacer cosas que sean agradables para todos.

Respeta el espacio personal de sus hijos

Para el sagitariano es muy importante crear un espacio de individualidad donde cada uno pueda dar rienda a sus sentimientos y formas de expresar su creatividad, sin que nadie le moleste. Como para él es necesario, considera que los demás también deben tenerlo.

Animará a sus hijos a desarrollar su potencial

El padre de este signo siempre recomendará salidas y aventuras que supongan una huida de la rutina, como ir a la playa o de camping. Cualquier viaje que implique un poco de aventura y, preferiblemente, una estrecha relación con la naturaleza.

También animará a sus hijos en las artes, despertando su interés por la música, el teatro, la escultura y la pintura, ya que considera que dar rienda suelta a estos sentimientos es una forma muy especial de permitir la conexión con sus sentimientos.

Le cuesta trabajo verles partir

A medida que sus hijos crecen, a los Sagitario les puede resultar difícil dejarles partir y enfrentarse al mundo por su cuenta, ya que les gusta su papel de padres y están dispuestos a ser los mejores en este campo. Así que acaban sintiéndose un poco abandonados.

Posiblemente la adolescencia sea la fase más difícil para los padres sagitarianos, precisamente por este motivo. Pero todo son fases y la edad adulta suele volver a unir a padres e hijos en aventuras similares. Con el tiempo, también vivirán grandes experiencias con sus nietos.